domingo, 20 de marzo de 2016

JUAN PABLO CIFUENTES PALMA [18.269]


JUAN PABLO CIFUENTES PALMA

(Chile, 1985). Reside en Chile.



A TUS OJOS

A mi madre María Inés

La luna intranquila en la noche silenciosa
vigilabas mi sueño como si fueras
esa inútil sombra que no me abandona
tocabas mi frente que parecía un desierto ardiente
besabas mi mejilla cual lluvia veraniega
y yo dormitaba en mis alucinaciones
y tú te desvelabas por mí y nunca lo supe
nunca lo contaste, no conoces la palabra sacrificio.

Cuanta gente habló de mí gracias a tus palabras
ancianos que nunca he conocido
dueñas de casa que me saludan cordialmente
y yo intranquilo ante esas sorpresivas miradas
no sabía que te gustaba alabarme
nunca hice nada para tener vanagloria
me convertiste en un ídolo
aunque sea un demonio…
a tus ojos seré un dios que bajó del olimpo
para protegerte toda la vida.

Ay, María Inés, ¿Qué serán de tus huesos?
¿dónde estará mi corazón cuando tu imagen
sea una cumbre borrascosa y mi piel
esté recubierta de gusanos y lágrimas?.

Y me muero en mis incertidumbres
pero tu cariño permanece inmutable
pase lo que pase. Esta noche eterna
recuerdo, cuanto me amas, amas.

A tus ojos me convierto
en un hombre. Me abandona el poeta
y queda solamente el hijo.



POEMARIO: DILE A JESUS QUE TENEMOS HAMBRE


IMPRUDENCIA.

Las calles de oro se han convertido en lóbregas sendas,
la esperanza del futuro se ha perpetuado en un desgano
En uno sólo, tan sólo uno.
No hay lugar para trivialidades, ni fantasías
Es mejor pensar que nada nos queda
Que aunque soñemos a raudales
No somos más que unos simples mortales
¿O inmorales?
Podría decirse que es tiempo de dar vuelta la hoja
Como si el escritor fuera capaz de contemplar en la lontananza
Los sin fin de sueños acumulados y desechados por los caminos
¡No y diez mil veces no!.
No hay que crear falsas ilusiones.
Es fruto de la imprudencia que lloro todos los días.
Cuando hablo, cuando camino,
Cuando escucho, cuando veo,
Cuando pienso, cuando callo,
Cuando recuerdo o cuando sueño
La imprudencia atosiga mi alma como el más vil de los castigos
Ni siquiera una pena eterna puede sopesar esto
Pues al ser eterna se pierde con ella las esperanzas.
Pero esta ruin y malcriada pordiosera,
Sorprende cada día con su audacia.
Es un hecho consumado,
La imprudencia es lo que mueve al hombre
Es lo que lo hace ser tan indigno.
Tan poco, prácticamente nada.



IRONÍA.

De la cordura en las aguas tibias
Cada día se reconforta mi alma.
De Junio en las lóbregas lluvias
La maestra eres ironía.

Ya no sé si lo que escribo es ironía porque soy tu esclavo o
No soy tu esclavo porque es irónico lo que hago.

Como una estrella en las montañas de la conciencia apareces
Estoy loco sino te conociera.
Coqueta dama eres
La más irónica, la más auténtica,
La más viva, la más perfecta.

En la vida de los hombres apareces porque temes a las tinieblas
¿O temes a los hombres que viven en tinieblas?

Como un deseo anhelado en la vastedad de la cordura
Te vistes de gala para disfrutar de nuestra locura.
¡oh ironía! Como extraño sentir tu aroma
Se vuelve la vida vacua sin ti.

Mi alma se hermosea de tu divina presencia.
Pero se afea de tu presencia divina.

Que explote antes la tierra
Que tierra hay de sobra
Pero si tú, amada de ojos alegres, te alejas
Se acabó la fiesta permanente
A las tinieblas me regresas
Al silencio me exilias.

Ironía te quiero ironía
Ironía te necesito ironía
Ironía no me dejes ironía
Ironía sin ti no existo ironía.



ENVIDIA.

¡Ay de mí!, que ahí te vi
hay en los corazones alegres
Ahí hay, ahí hay.
Hay en los que lloran amargamente
Ahí hay, ahí hay.
¡Ay de mí!, que ahí te vi.

Que tu presencia no se sienta viva
Que tu ausencia se sienta viva.

¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en el que trabaja de sol a sol
Ahí hay, ahí hay.
¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en el que trabaja horas extras
Ahí hay, ahí hay
¡Ay de mí!, que ahí te vi.

Que tu frescura escurra por mis venas
Que tu podredumbre no contamine mis venas.

¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en el que vive en el campo
Ahí hay, ahí hay.
¡Ay de mí!, que ahí te vi
Hay en el que mora en la ciudad
Ahí hay, ahí hay
¡Ay de mí!, que ahí te vi.

Deja abrazar por mi pecho tus juegos
Deja escapar a mi pecho de tus juegos.

¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en el que sueña con la casa propia
Ahí hay, ahí hay.
¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en el que veranea en la casa de la playa
Ahí hay, ahí hay
¡Ay de mí!, que ahí te vi.

¿Te gustaría vivir una temporada en mi casa?
¿Te gustaría no quedarte para siempre en mi casa?

¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en el maestro de escuela
Ahí hay, ahí hay.
¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en el círculo de amistades
Ahí hay, ahí hay.
¡Ay de mí!, que ahí te vi.

Quisiera que mis ojos te vieran
No quisiera que en mis ojos te vieran.

¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en la prehistoria
Ahí hay, ahí hay.
¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en la historia
Ahí hay, ahí hay
¡Ay de mí!, que ahí te vi.

Quiero tocarte algún día
No quiero que me tocaras algún día.

¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en los de izquierda
Ahí hay, ahí hay.
¡Ay de mí!, que ahí te vi
hay en los de derecha
ahí hay, ahí hay
¡Ay de mí!, que ahí te vi.

Cuando llore por tu estocada aléjate de mí
Cuando disfrute con tu estocada no te alejes de mí.

¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en cada rincón de la tierra
Ahí hay, ahí hay.
¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en la infinidad del universo
Ahí hay, ahí hay
¡Ay de mí!, que ahí te vi

¡Aquí estoy! si vas de paso rápido
No estaré si no vas de paso rápido.

¡Ay de mí!, que ahí te vi
Hay en los ángeles
Ahí hay, ahí hay
¡Ay de mí!, que ahí te vi
Hay en los demonios
Ahí hay, ahí hay.
¡Ay de mí!, que ahí te vi
hay en el pasado
Ahí hay, ahí hay.
¡Ay de mí!, que ahí te vi.
Hay en el presente
Ahí hay, ahí hay
¡Ay de mí!, que ahí te vi
y habrá en el futuro
Ahí hay, ahí hay
¡Ay de mí!, que ahí te veré.



AVARICIA.

Sólo en el silencio,
Silencio atosigante de la mañana
Mañana a la cual ni siquiera saludas
Saludas sólo a los que te agradan.

Y fue feliz. Y es feliz. Y será feliz. Y sería feliz
Si ya no te tuviera.

Has hecho de mi vida un martirio
Has hecho de mi alma un museo
Has hecho de mi mente un tesoro
Has hecho de lo que soy un avaro.

Y fue feliz. Y es feliz. Y será feliz. Y sería feliz
Si ya no te tuviera.

El atleta corre. Pero tú no corrías.
El soldado pelea. Pero tu no peleabas.
El feliz disfrutaba. Pero tú no
Tú solo atesorabas.

Y fue feliz. Y es feliz. Y será feliz. Y sería feliz
Si ya no te tuviera.

No importa la estación del año
Año en que prometiste abandonarme
Abandonarme para darme vida
Vida que no tengo por ser tu esclavo
Esclavo de tus tesoros
Tesoros que has acumulado
Acumulado... ¿para qué?.

Y fue feliz. Y es feliz. Y será feliz. Y sería feliz
Si ya no te tuviera.

Si el dinero hablara. Tú serías un ventrílocuo
Si mi alma se saliera de este cuerpo. Mejor arranca, mejor arranca.

Y fue feliz. Y es feliz. Y será feliz. Y sería feliz
Si ya no te tuviera.

Por el tesoro acumulado Gracias
Por amarrarme a mi destino Gracias.
No hay entrada, ni hay salida
Es mi destino
La avaricia me impide dar mi alma a un extraño.

Y fue feliz. Y es feliz. Y será feliz. Y sería feliz
Si ya no te tuviera.




ORGULLO.

Permíteme que te describa.
Más que un oprobio te será un halago.
Como si creyera que te importara lo que pienso
Sé que en el fondo escuchas, en el fondo...

¡Salve tu resplandor
Las más vastas cordilleras de tu altura!
Aquellas que se codean con las bondades de la naturaleza
Naturaleza próspera y austera a la vez
Pero que sigue siendo naturaleza.

Te propongo un trato justo y ecuánime
Permíteme herirte
Tan sólo una vez,
Tú lo haces siempre.

Que grande es tu cualidad para un ser tan pequeño
Que portentoso es tu desplante para un alma tan miserable
No te juzgo, porque en el fondo soy como tú.

Con el mío se enlazan las raíces de tu camino
Con el tuyo se enlazan las ganas de abofetearte
Como verás no existe ningún lazo visible que nos una
Pero somos iguales,
Tú explícito, yo diría más bien salvaje
Y yo sereno, mas bien retenido.

Cuando la luna aparece por las noches
Tu camino no ha modificado su luz
Es un accesorio más de tu existencia
Como lo han sido tus pensamientos.
¿Crees que no me doy cuenta?
Estás a punto de dejar caer la lava por tus labios.

Pero a pesar de todo no eres un mal tipo
Si el orgullo no debe ser mirado como un mal requisito.
Eres así y punto
Así como yo soy bueno y estúpido
Tú eres engreído y orgulloso.

¡Menos mal que somos uno sólo!




POBREZA.

Los vivos se están muriendo de hambre...
Los muertos están vivos de tranquilidad y armonía.
Mientras más respuestas busquemos
Más dudamos, más soñamos, más desfallecemos.

El alimento estaba tan escaso que queríamos comernos
El canibalismo es pecado
Maldición, no tengo alimento.

Veo en los ojos la desazón, el abatimiento
Y no sólo en los ojos de los pobres
También en los de los ricos.
Éstos se sacian hasta al extremo de cosas materiales
Pero están tan famélicos en el espíritu.

Al final de cuentas...
La pobreza alcanza a los ricos y a los pobres
¿Quién dice que no hay justicia?
Cosa más justa yo no he visto.
Mientras algunos pelean por un pedazo de pan
Otros pelean por tranquilizar su espíritu
Tan pobres son, tan pobres somos, tan pobres seremos.

Pon atención y observa, querido lector
Observa como estás sumido en la pobreza
Como te codeas con ella
Como disfrutas de su estadía.

Pero que esto no enturbie tu pensamiento
Ni la congoja te atormente.
Somos pobres...
No hay nada malo en decirlo,
No hay nada malo en serlo.

La pobreza alienta tu ya pobre vida
Con esperanza, con desesperación
Con sueños, con pesadillas
Con deseos, con carencias
Con alegría, con tristeza.

La pobreza es lo que nos da la vida
Si fuéramos ricos ya estaríamos muertos.



PEREZA.

Era tanto el cansancio que tenía en su cuerpo
Que no tuvo ánimo para levantarse,
Tomar desayuno e ir al trabajo
Que prefirió lo más fácil,
Lo más placentero, lo menos esforzado
Prefirió la dulce muerte
Que bajo sus alas la llevaran a descansar en un sueño eterno
Fue lamentable cuando se enteró
Que la muerte también quería morir
Que era tan perezosa como ella.



IRA.


Tenía tanta ira en su alma
Que decidió dejar inconcluso este poema.




EMOCIÓN

Que uno llore cuando alguien muere, es emoción
Que uno ría cuando alguien es feliz, es emoción.
Que uno se conmueva cuando ve el sufrimiento ajeno, es emoción
Que uno se quede sin palabras frente a un secreto, es emoción.

¡Emoción!, ¿Porqué te apareces para desafiarnos?

Siento en mi ser la angustia
Siento en mi ser la alegría
Siento en mi ser el placer
Siento en mi ser la desesperación
Siento en mi ser el sufrimiento
Siento en mi ser la esperanza
Siento en mi ser la duda
Siento en mi ser la emoción.

Cuando la mirada se pierde en el infinito
Es porque la emoción se ha apoderado de su pensamiento
Cuando el mutismo lo envuelve en su mundo
Doña emoción es la responsable de aquello.

¿Podrán mis ojos contemplar todas las emociones que observe?
¿Podrán mis oídos oír todas esas voces que escuche?
¿Podrá mi mente pensar aquellos pensamientos que me esperan?
¿Podrá mi corazón soportar otra cadena, otra carga.?

La respuesta me traslada al inicio de la vida
El sinónimo que tiene es alegría
Pero la alegría no es otra cosa que una emoción.
La respuesta me traslada al ocaso de la vida
El sinónimo que tiene es tristeza
Pero la tristeza no es otra cosa que una emoción.

Si pudiera resumir mi escritura señalaría
Que todo es emoción.
Que la emoción es pasajera
Pero que es continua.
Mientras una emoción se aleja de nosotros
Aparece otra y otra
Y así en una larga cadena
Que ni siquiera la muerte puede detener
Porque se traspasa a otros
A quienes nos rodean.

La emoción es un parásito
Una bacteria que no tiene cura.



INSTINTO.

Bien, no es un juego esto del instinto
Bien, es algo que es innato en nosotros
Bien, me gustaría saber su origen
Bien, quisiera pensar que esto es eterno.

Mal, su dulzura es una hipocresía
Mal, cada acto tiene una consecuencia
Mal, el raciocinio se esfuma junto a los sentimientos
Mal, nos convertimos en bestias, sólo en eso.

Solo se escucha un susurro
Es una voz silenciosa, es el instinto.

Bien, para algunos son actos de valentía
Bien, a veces es necesario dejarse llevar por ellos
Bien, son una especie de salida, quizás la última
Bien, no digo más que bien.

Mal, ya no sé si soy yo el que actúo
Mal, me dominan o yo los utilizo
Mal, es traicionero y vengativo
Mal, no digo más que mal.

Solo se escucha un susurro
Es una voz silenciosa, es el instinto.

Bien, porque aparece cuando lo llamo
Bien, porque no requiere de un compromiso
Bien, porque es parte de nosotros
Bien, porque si fuera mal no habría instinto.

Mal, porque aparece cuando no lo llamo
Mal, porque nos compromete cuando no queremos
Mal, porque no nos abandona, es parte de nosotros
Mal, porque si fuera bien no habría instinto.

Solo se escucha un susurro
Es una voz silenciosa, es el instinto.



MENTIRA.

¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que se llaman políticos
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son abogados
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son artistas
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son empresarios
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son periodistas
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son médicos
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son educadores
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son estudiantes
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son padres
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son hijos
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son bohemios
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son puritanos
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son creyentes
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son ateos
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que son humanos
¡Soy mentiroso, ya estoy mintiendo!
Pero sí existe, es útil, es buena, es mala, es traicionera.
La utilizan aquellos que están vivos.
Si no se utilizara ya estaríamos muertos.



PREJUICIO.

La vi una sola vez y me bastó para odiarla
Lo escuché una sola vez para saber que era un hipócrita

La primera vez, es una ilusión
Es un embrujo, es un engaño
Es un prejuicio, es la primera vez.

La vi junto a su amado para darme cuenta que era una ramera
Lo escuché hablando sobre la libertad para saber que era un idiota.

La primera vez, es una ilusión
Es un embrujo, es un engaño
Es un prejuicio, es la primera vez.

A cada paso, un prejuicio
A cada sonido, un prejuicio
A cada silencio, un prejuicio
A cada letra, un prejuicio
A cada acción, un prejuicio.

La vi en la plaza para saber que era ilusa
Lo escuché riendo con sus amigos para saber que era un oportunista.

La primera vez, es una ilusión
Es un embrujo, es un engaño
Es un prejuicio, es la primera vez.

La vi junto a sus padres para saber que no era independiente
Lo escuché dando explicaciones para saber que era un perdedor.

La primera vez, es una ilusión
Es un embrujo, es un engaño
Es un prejuicio, es la primera vez.

A cada paso, un prejuicio
A cada sonido, un prejuicio
A cada silencio, un prejuicio
A cada letra, un prejuicio
A cada acción, un prejuicio.
A cada soplo de vida, un prejuicio
A cada muerte, un prejuicio
A cada prejuicio, un prejuicio.

La primera vez, es una ilusión
Es un embrujo, es un engaño
Es un prejuicio, es la primera vez.

Evitar la primera vez es la salida
Pero si no hay primera vez
¿Qué sería de nosotros?



LIGHT.

Que no puedo salir a la calle si no estoy peinada
Que no puedo ir a una fiesta si no voy con un traje nuevo
Que no puedo comer esto porque tiene muchas grasas y proteínas
Que no puedo tomar esto porque tiene muchas calorías

¡Señoras y señores!
Tengan el honor de presentarles nuestra última adquisición
Que es resultado del proceso evolutivo.
El hombre light, la mujer light,
La cultura light, el mundo light.

Es tan light que ni siquiera se traduce a nuestra lengua materna.
Es tan light que no merece mayor análisis que una presentación funesta.

El lightcismo es el fenómeno en boga
Es lo que nos unirá en un sólo pueblo
Todos seremos lights,
Todos seremos uno.

Es el último fruto del hombre
Está podrido, pero no esperen demasiado
Recuerden que es light.



La condena de Dios en  la obra “Dile a Jesús que tenemos hambre”
de Juan Pablo Cifuentes

Por María Ester Ortiz Sánchez
mariaesterortiz@gmail.com

El ser humano es un ser sociable por naturaleza que de manera colectiva construye y domina su entorno para validar por medio de la razón, su actuar y permanencia en el mundo. Desde la Antigua Grecia hasta la modernidad el hombre ha buscado las respuestas que expliciten los grandes misterios de la Tierra. Por ello, DIOS como ser omnipresente fue el gestor del discurso teocentrista que la iglesia ocupó para dar respuestas a las antiguas interrogantes del mundo dictando las normas morales, sociales y culturales que mantuvieran el orden social y político. No obstante,  con el comienzo de la modernidad el hombre se alejó del teocentrismo para adquirir desde la ciencia y la razón el dominio de todo lo que lo rodeaba y con ello los grandes valores y normas morales fueron cayendo como torre de naipes.

Desde entonces, la sociedad ha ido sufriendo una pérdida de razón que va más allá del propio conocimiento científico y el desarrollo tecnológico sino que entre más centró su mirada y quehacer social en el dominio de la ciencia, el ser humano más se apartaba de sí mismo y de sus valores y creencias. Esto hizo prevalecer la idea de la razón por sobre los sentimientos y las normas, transformando la sociedad en una cuna en constante riesgo de ser atacada por los vicios y los anti-valores que de ella misma emanaban, lo cual dio pie para decir que junto con la caída de las grandes instituciones, hoy han caído los grandes valores que forjaron a la humanidad de  antaño  y que hoy es amenazada por la carencia de valores, la pérdida del sentido familiar y donde la dignidad y la empatía ya no tienen cabida en un mundo con poco espacio para sentimentalismos, pues la inmediatez del trabajo, el exceso de tecnología nos ha convertido en seres ciegos que no vemos más allá de lo que los medios comunicacionales nos dejan ver.

Esta, señores, es la paradoja de la humanidad, vivimos en una sociedad altamente tecnologizada, donde el mensaje instantáneo permite que nos comuniquemos con un solo click derribando, incluso, kilómetros de distancia entre un individuo y otro, pero que contrariamente, nos han consumido en soledad. Resulta, frustrante, ver como la tecnología nos ha separado tanto de nosotros mismos, ya no hablamos  de persona a persona, sino chateamos, enviamos mensajes, escribimos en muros de Facebook dejando que lo público domine nuestro mundo privado hasta el punto de relativizar nuestra manera de pensar y actuar con el  fin de encajar en la nueva era social.

Dile a Jesús que tenemos hambre es un grito de hambre, pero no de aquella biológica sino es un grito de dolor humano que converge de las entrañas de una sociedad enviciada, contaminada por el egoísmo, en el cual el hombre se destruye a sí mismo cuanto más vive en ella. El escritor, Juan Pablo Cifuentes, nos expresa en cada verso, el escenario de una humanidad que cojea pero que nadie se atreve a ayudarla a caminar a paso firme sino que se contempla con la lástima y la ceguera y donde cada uno cierra la puerta de su hogar, enciende la televisión y continua nuevamente con su vida. Así comienza una rutina de automatización, en que todo se hace, se destruye y se transforma. Nos dejamos inducir por quienes nos gobiernan, actuamos conforme a las leyes, sin embargo, nos quejamos, sufrimos y nos esperanzamos en la idea de que todo cambiara mañana. Es la pereza, la ira, la imprudencia, la ironía, la avaricia, el orgullo y la pobreza, las que invitamos a entrar en casa como invitadas de honor, cuyos falsos valores sostienen en parte nuestras acciones diarias.Dile a Jesús que tenemos hambre es un reclamo, un llamado de atención, que se cruza en la idea de que, quizás, la única esperanza es pedirle a Jesús que nos salve del hambre moral que nos invade. Esta ironía del concepto religioso no es un discurso eclesiástico sino político, social y cultural, pues nos demuestra que la sociedad perdió las grandes instituciones que la gobernaban, que no existe confianza ni fe en la política ni en las instituciones de beneficencias y donde el discurso hoy huele a mentira y cansancio. Esta obra homónima del escritor yumbelino, nos invita a criticar y a someter a juicio la manera en que pensamos y actuamos. Su discurso poético utiliza a Jesús como elemento testimonial de lo que está sucediendo, lo llama para que actué como ser justiciero frente a la inmoralidad que nos consume, sin embargo, el llamado es un sueño que nunca se concreta, pues es un recurso lingüístico cargado de significado social que sirve como punto de unión para identificar al lector con la obra. “Jesús” “Alá” ”Jehová” es la nomenclatura que todas las culturas utilizan para identificarse en una religión u otra y  es visto como el mesías de la salvación. No obstante, este no es un libro de cristianismo, y quienes crean solo en el título estarán cegados en la idea de que el tema principal se construye bíblicamente. No, señores, está es una obra de protesta social, de espejo moral, que nos invita a auto conocernos desde los antivalores y los vicios y que ironiza a la sociedad actual no solo chilena sino que puede también identificarse con cualquier cultura.

No es casualidad que el texto inicie con el poema “Imprudencia” donde expresa “La imprudencia es lo que mueve al hombre, es lo que lo hace ser tan indigno. Tan poco, prácticamente nada”. En este primer poema pone de manifiesto, sin matices y sin lugar a dudas, la existencia de un hombre indigno, sin nada que justifique y le dé sentido a su existencia. Luego, nos encontramos con “Ironía”, poema en el cual el poeta se burla de la palabra que utiliza como recurso metalingüístico en el que el mismo concepto juega de significado al mismo tiempo “Como un deseo anhelado en la vastedad de la cordura / te vistes de gala para disfrutar de nuestra locura.” La frase te viste de gala es la perfecta burla hacia el recurso utilizado para darle fuerza al mensaje mismo de como el hombre construye sus ideas en mentiras y palabras vacías. Tras continuar con la lectura nos encontramos con “Orgullo” poema que se puede considerar como un retrato de la dualidad que existe en el ser humano, esa mezcla de humildad y orgullo, que sacamos según lo amerite la ocasión: “Pero a pesar de todo no eres un mal tipo /si el orgullo no debe ser mirado como un mal requisito. / Eres así y punto / así como yo soy bueno y estúpido/ tú eres engreído y orgulloso. / Menos mal que somos uno solo” La utilización de una actitud apostrófica da cuenta de la dicotomía que existe en el hombre, es decir, somos una parte de orgullo y otra de humildad, somos verdad y mentira, somos todo y nada. Esa es la ironía de la cual el autor alude a lo largo de sus versos.  Esta obra, es un poemario anarquista, quizás frustrante de la humanidad, pero al mismo tiempo, crítico que busca despertarnos del mundo onírico para hacernos caer de bruces contra el suelo de la realidad que tanto queremos ocultar. Asimismo, al autor se burla de la relatividad, y al mismo tiempo, de la ignorancia,  con que el individuo se mira a sí mismo. Es el caso del poema “Light” en el que el hablante expresa: “No puedo salir a la calle si no estoy peinada/ que no puedo ir a una fiesta sino voy con traje nuevo / que no puedo comer esto porque tiene muchas grasas y proteínas” y termina diciendo “Es el último fruto del hombre / está podrido, pero no esperen demasiado/recuerden que es light”. En estas líneas el autor nos habla del concepto light como aquella palabra gringa que entró a nuestra cultura para referirse a lo delgado y  liviano de los  alimentos pero también alude a la manera  de cómo vemos la vida, donde todo es relativo y puede ajustarse a nuestra conveniencia cuando queramos y por razones justificables o no. 

El poemario invita a que caminemos por un libro cargado de ironías, juegos de palabras que se van mezclando con recursos lingüísticos característicos del escritor y que la hacen ser particularmente atractiva, pues el lenguaje liviano es consecuente con la necesidad de que la verdad debe decirse a todos y en todas las formas y lenguas posibles. Esto significa que su lenguaje es cercano al lector, quien se sumergirá en una polémica carta de infortunios morales, en donde la religión, la cultura, la educación, los vicios, conviven juntos y se burlan de nosotros mismo y nosotros de ellos como un juego de mentiras donde el perdedor nos es el que dice la verdad primero sino aquél que es capaz de apartarse y reconstruirse moralmente de nuevo. 

De este modo, Dile a Jesús que tenemos hambre del escritor Juan Pablo Cifuentes, está con la mirada puesta en la sociedad y en sus vicios y con la apertura de pensamientos donde las ideologías nos permitan contribuir a una mejor sociedad, pues eso es este libro, una crítica, un reclamo y una protesta a voz alzada que tiene sed y hambre de justicia, de amor, de familia, de educación, que tiene hambre de empatía y sueños que ya no quiere promesas de falsos mesías que traerán la paz que tanto se busca, y que por sobre todo, pide que no se le predique más, ya no que se quiere hablar de Jesús, mejor tráiganlo aquí para que nos explique qué sucede y se acabe todo.


“Dile a Jesús que tenemos hambre”, Juan Pablo Cifuentes Palma, Editorial Opalina Cartonera, 1ª Edición (2016), 48 páginas.




“A oscuras grité tu nombre 
en el muro de Berlín”

por Juan Pablo Cifuentes Palma
2016

Editorial Isidora Cartonera
maqueta a cargo de Adrián Olivares
Impreso en Santiago de Chile
septiembre, 2016


CUANDO CONTAGIO VIDAS SILENCIOSAS

Cuando contagio vidas silenciosas
huéspedes mortales, monarquías argentinas
representaciones para comunidades heterosexuales
busco al fundador de mi nombre.

Así recorro la montaña mágica de Mann
humillándome poco a poco, misteriosamente
toco la puerta de la capilla de ángeles que exorcizan
que hablan en lengua callejera y autónoma
dios me ha dado la muerte creadora
y permanezco sigilosamente ausente
tan presente.

Las llaves inigualables permanecen escondidas
y la fugacidad del río se prolonga en océanos fríos
moriré rodeado de mí
en el poema eres pasado, nadie permanece estático
no se puede caminar.

Gocemos porque para eso nacimos libres de pecado
y la misericordiosa gracia de la inocencia
comprobemos, otra vez, el desierto nos espera
y quiero revolcarme en el oasis catorce.



A OSCURAS RECORRO EL MURO DE BERLÍN

Mujeres que representan perfectas imágenes
íconos de sirenas endemoniadas y ninfómanas
a oscuras recorro la muralla de Berlín
sepulcros blanquecinos que rayo con acuarela y mermelada
desoladas murallas cubiertas con recuerdos ingratos
para que los demonios disfruten tu desgracia.



YO SOY YO

Así, yo soy yo, un yo.
en mí todo es posible...
detener el movimiento de traslación,
peregrinar a la luna por el nilo.
Así, yo soy yo, un yo.
En mí todo me supera...
La frágil existencia,
carcajadas y vómitos, héroes de antiguerras,
medallas de oxígeno
así, yo soy yo, un yo.
En mí todo se transparenta...
las oscuras nieblas mentirosas,
las religiones cristianas,
el momento en que me humillo
y reflexiono un instante:
¿así, yo soy yo, un yo?



DESNUDOS RECORREMOS EL MURO DE BERLÍN

Silencio y quiero que respeten el aprendizaje
aunque me caiga del último peldaño de la escalera
ahora soy aquí en lo posible
ciego reparto folletos y garabatos arameos
me contagio de poesía
vendo limosnas de versos anticomunistas
me apedrean por ser un artista diferente
qué se imaginan las piedras que me azotan
desnudos recorrimos la muralla de Berlín
no sabía que hablar fuera un delito
quisiera esconderme, llamen
la ambulancia marcha en mi búsqueda
no hay noche
soy yo quien no abre los ojos.



O SOY FUEGO QUE RESPLANDECE SANGRE

O soy fuego que resplandece sangre
y gobierno pedazos miserables de prejuicios
que apuñalan logísticamente amores
y quién dirá: sueño abrázame mañana
o definitivamente: ayúdenme.

Voy caminando hacia atrás tras la puerta
viene la ventana oculta y peligrosa
en cuya infinita sabiduría me emborracho
con el agua bendita de la lluvia de junio
que acabará un sábado a las tres de la madrugada
porque no se le renovó su permiso de circulación
y si digo: ayúdenme, no se ofendan
si termino apuñalando el apellido en tu boca
por descubrir que esa ayuda no es honesta.




A OSCURAS CURAS CURAN

A oscuras curas curan
-curanderos-
-curagüillas-
-curados (borrachos, ebrios, mujeres, niños, perros)
se aglutinan ruidos en la glotis
vacíos, vicios, viciosos vacíos
en la penélope del efesios
-me remito a tu nombre-
-atún hombre-
-a tu hombre(ra)-
de terciopelo, de piel de serpiente
paradisíaca, vorágine
osadías, colillas de cigarro en la cintura
de la botella de vodka soviética, hecho en américa
manifiestos surrealistas... yo creo en mí
a oscuras curas curan
-ósculos, (sí, muchos, demasiados)
ósculos que terminen en la zetapara
siempre. amén. jamón.



FELICES RECORREMOS EL MURO DE BERLÍN

Boca loca
como gotea noche, mierda,
agua, sexo, boca loca
palabras, agonías, basta
basta, mmm
yo quiero
ahhh sí, sí, sí,
muerte ligera
estado alterado
alucinaciones, piel
cuerpo, mente, agonía
risas, risas de guagua suicida
muérdeme, muérdeme
toca para mí, toca
muerte, toca, toca para mí
más risas, más todo
cerdos voladores, olores
gallos con cresta azul
loca la ve canilla lo
vaca para todos.




POEMA ORINADO

Y
Así...
pasa el río
el gran torrente
la enorme cantidad
de sustancias
acumuladas por todo el
tiempo que
aguantamos
y puta
que
aguantamos
ya
sale
un chorrito
pero,
el placer
permanece
abro los
ojos y
respiro
tranquilo
pasó el vendaval
todo se
vuelve
alegre
me
siento
ç
re
-
nova
-
doooo
sólo
falta
lavar
-
se. las
manos
-
anos.




FELIZ, FELIZ

Alma, alma mía, mía, alma feliz
a triunfo, a gloria, aleluya, a mí
profundas huellas por no reconocer destinos
se desvanece la noche y así
y por ti antes que anochezca
feliz, feliz
manos deseosas de vivir en tu alma
ágiles, como siempre te sedujeron
y yo me desmayaba.



A MI NIÑA

Para tu nombre escribo la rosa de su perfume
me escondo en la sombra de la luna oceánica
donde aparece dios y se desnuda su corazón
que me arranquen los ojos, quiero ser edipo
antes de contemplarte, impávida, sin tu esencia
mírame, poeta, pedazo de carne floja y suelta
no me digas tu nombre que mi alma lo reconoce
entre las estrellas, mis latidos y tus ojos verdes.



EN EL JARDÍN DEL CEMENTERIO

La muerte. Un eterno resplandor.
La muerte. Un jardín de rosas marchitas
hay tantas historias
tantos hombres
los sueños se acaban imprudentemente
y los deseos indecentemente se terminan
permanece, el
último suspiro crepuscular
en el jardín del cementerio
hay fiestas escondidas
muertos que todavía lloran
gusanos que pecan de gula
sobreviven los huesos
las uñas crecen y los pelos
y nada más. La muerte arrasa corporeidades
hasta que alguien respire
el polvo de nuestros últimos huesos.



A UNA MADRE QUE CAMINA RÁPIDAMENTE

Yo no estaría solito en el día de mi cumpleaños
y no tendría que esperar un saludo ausente
rogar a mis amigos para que beban un vaso de
cerveza y fumen y me acompañen
en una noche sigilosa que se aproxima
cuando las dudas arremolinan
me acuerdo de ti. madre,
de tu nombre, de tu historia
pero caminas rápidamente
y yo me estaciono en la nada
prefiero comer chocolates
y tú dale, dale, dale: uno, dos, uno, dos
-caminas, caminante, caminasy
te alejas como las nubes negras
cargadas de lluvias y relámpagos
y te digo: detente
y no escucho tu respuesta
te acercas a la cumbre, te acercas a dios
permanezco impávido
(¿por qué subir esa montaña?)
-detentey
caminas, dale, dale, dale: uno, dos, dos, uno, uno
uno, uno, dos besos te lanzo en una flecha
pero el viento la desvía cruelmente.



LOS BORRACHOS ENTRE NOSOTROS

Los borrachos entre nosotros hicieron fiestas
y celebraron reuniones que terminaron en peleas
cuántas veces conservaron conversaciones
tranquilas relaciones, amistades, risas
pero la noche del trago todo lo cambia
se transforma uno en un otro tanto, tonto, tonto
y no nos acordamos de quiénes somos, dónde
estamos y con quién reñimos acaloradamente.



TODOS VAN AL CIELO DEL BIOBÍO

No tengo dinero para comprar rosas negras,
blancas, rojas, transparentes
para engalanar ese recuerdo que de ti se apodera.
No tengo dinero ni para comprar un pasaje
ni para dar un abrazo, ni para llorar, ni dejar que lloren en mi
hombro
no tengo nada para ofrecer
ni palabras, ni ánimo, ni esperanzas.
Solo mi escritura. Eso.
Eso soy. Eso te regalo:
y así entrego mi obsequio
y así digo presente,
aunque estoy ausente, reausente.
Mi poema estará contigo…
Calles. Entonación de primavera
largos desiertos en multitudes impacientes
se acercan mares, se acercan ríos, se acerca
uno a dios. Se acerca a ti
la última mirada inagotable
no sé qué responder a ninguna pregunta
hay fuego en el aire
todos van al cielo del Biobío. Las
gaviotas, los ratones, las mujeres,
los niños, los hombres, dios, sueños
peregrinaciones habituales en la costanera
no hay crepúsculos tan infinitos
como el recuerdo de ese muerto abandonado,
de esa sombra que permanece inmóvil,
putrefacta, fósil, arcaica, allá
en ese día. El hermoso día cuando
todos van al cielo del Biobío. 



DESTRUISTE TODO

Destruiste todo.
El mar estrellado de peces que cruzan el horizonte,
la noche inmaculada de gritos inviolables que ha caído
las hojas de un árbol. Los ríos. La sonrisa,
el placer de escuchar las aves del cielo,
nunca más
para ti ha llegado el día del juicio
no nos olvidamos de los azotes
no nos olvidamos de la sangre derramada
y todo para qué. Por vanagloria,
una simple leyenda. Otra más.
El descanso no sobrevive. La tormenta permanece
más allá de la calma esperada. Soñamos. Sí,
amigos, soñamos con el futuro, con esa esperanza
con los ecos del abuelo y del padre
las oraciones milenarias de todos los santos
que ingenuamente ahora lloran en sus tumbas,
nos regocijamos con tu nacimiento
celebramos tu cumpleaños, pero nunca estás presente.
que fácil es volcar la culpa sobre nuestros hombros
que fácil se te hace decir que te hemos olvidado,
nunca más.
El aire se ha contaminado con tanta religión pagana
tanta charlatanería, tanto misticismo barato
y fraudulento.
Tantas palabras huecas que el viento traslada
de flor en flor
de pensamiento en pensamiento,
pensaste que seríamos siempre unos inútiles,
nunca imaginaste que algún día creceríamos.
Nos diseñaste para ser unos huérfanos.
Sí.
Unos malditos niños huérfanos.
Ya no temo a la noche y tu venida
como ladrón, que para eso sí bien mereces tu nombre
ya no tememos la leyenda del juicio y el infierno
ni el crujir de dientes, ni el magnífico libro de apuntes.
somos débiles.
Lo reconocemos,
somos débiles y más débiles
pero nunca seremos totalmente ingenuos
alguna neurona vencerá la ociosidad que has impuesto
en tu omnitodo con el cual nos gobiernas, pero basta.
Dejemos de mentirnos entre gitanos.
Hace tiempo que nos has abandonado. Años, siglos,
hace tiempo que estamos solos y miramos el cielo
y vemos solamente estrellas
estrellas que son imágenes del pasado, como tú,
son peregrinas leyendas que contemplamos en el presente
pero no nos importa nada de eso,
ahora lo único que importa es nuestro aislamiento,
es nuestro inmediato deterioro
es ese sentir que nos estamos debilitando entre murallas
deformes y reiterativas. No más religión.
No más de ti. No más de lágrimas que no se secan
Se acabó.
Destruiste todo.
El monte en donde mis rodillas invocaron infructuosamente tu
nombre,
el suelo que besé esperanzado de encontrar un nuevo camino
la iglesia que tus hijos construyeron para invocarte
ya no es más que una de las tantas cuevas
de Alí Baba
sólo hay que decir: ¡ábrete sésamo!
y las riquezas sobresalen a las oraciones y súplicas
destruiste la leche, el pan
convertiste nuevamente el vino en sangre
nuevas plagas se derramaron en el Egipto del universo
destruiste como moisés los mandamientos
cuando abandonaste tu pueblo para ir a
jugar con tus estúpidos caprichos. Seguramente,
es probable que así sea,
seguramente estarás ya modelando nuestra evolución,
quién será nuestro nuevo prototipo,
verán mis ojos tu nuevo capricho
antes que tus manos borren nuestros nombres
de esta historia trágica.
Destruiste todo.
Los pasos se alejan
la viuda regresa humillada a su casa
el sol brilla pero nuestros ojos lloran
es que te creímos.
Creímos en ti, trabajamos en tu nombre,
vivimos en pos y para él. Y tú,
¿qué cosa has hecho por nosotros
Más que mirarnos con tu sonrisa irónica?
Destruiste todo.
Incluso tu nombre y tu prestigio,
no nos culpes a nosotros.
Tú. Nos destruiste.




LA NOCHE HA CAÍDO

La noche ha caído bajo su siempre desagradable oscuridad
todo se ha nublado,
mis ojos cada vez más ciegos, más torpes, más inútiles,
mis manos negras, no por el barro,
por la contaminación. Nos estamos muriendo.
Conscientes, sí, somos conscientes
quizás demasiado conscientes de nuestro fracaso
intentamos ser alguien
un tipo con suerte, normal, una persona buena
un buen cristiano
hemos fracasado, como siempre,
quizás como nunca antes hemos caído en el abismo
golpeamos tantas puertas
tantas veces infructuosamente
nos golpearon en la nariz
cuando aquel nos cerró la puerta.
Fue nuestra culpa.
Sí, nuestra.
Nosotros lo sobrevaloramos.
Le dimos estatus divino y le exaltamos
quizás aquel era demasiado tímido para estas costumbres
o tal vez fue nuestro peor error
la culpa que pagaremos siempre
dejemos que el molino siga funcionando
la noche se apaga
y nos apagamos con ella
la vida se agota, no queremos seguir
en estado de agonía.
Necesitamos creer en algo. Por qué,
no lo sé. Quizás el hueco que dejó Aquel es muy profundo
nos ha herido mortalmente,
no creo que las uñas del conocimiento se restauren
la sombra nos invita al diálogo
pero la noche se apaga
que alguien venga y apriete
mi botón de energía. 




LA LUZ SE APAGA

La luz se apaga
y con ella nos apagamos
lentamente...
Nos equivocamos. Otra vez. Como siempre
Nos equivocamos. Silencio. No lloraremos
Las manos transpiradas, sedientas de sangre
sedientas de fuerza, sedientas de ánimo
es tiempo de huir
al monte lejano, esconderse. Escondernos. Sí.
Tú en mi cueva solitaria. Yo en tu desierto altiplánico
conseguiremos un minuto
tal vez sólo sean segundos
un poco de tranquilidad
tran, tran tran, tranquilidad
fuimos cobardes. Lo sé. Lo saben.
No negaremos nada.
Venga el día del juicio. Que venga luego.
No tengo paciencia
mataremos a los ángeles que sonarán las trompetas
los veremos caer como Ícaro
desplumaremos sus alas, lo convertiremos en humano
para que vean que se siente la esclavitud
por ellos. Regresaremos a nuestro hogar
dejaré el monte. Dejaremos el olvido
nos equivocamos. La luz se apaga. Nos apagamos
fuimos ingenuos. Tú. Yo. Todos. En general,
nunca imaginamos la estafa
fuimos esa virgen que no debió existir
fuimos aquella que esperó pacientemente a su amo.
Recuerdas,
no llores mujer. No llores
recuerdas las infinitas noches de ansiedad
de esos lejanos días
cuando tu lámpara resplandecía y la mía también
cuando todo era maravilloso. Recuerdas,
no llores. Por favor. Nos equivocamos.
El aceite duró muchos años,
pero todo se acaba. Acércate,
ven, te protejo.
Tu lámpara ya no brilla. No llores
la luz también se apaga de la mía.
Creo, si tenemos suerte,
creo que podemos llegar con esta tenue lumbre hasta nuestro
refugio,
no perdamos tiempo. Nos equivocamos.
La luz se apaga. Se aproxima la oscuridad
no llores. Viviremos.




HASTA AQUÍ NO MÁS

Hasta aquí no más,
hasta aquí no más
Deténgase.
Sí, usted. Quien sea
hasta aquí no más
este camino se ha cerrado para siempre
regrese por donde venía.



Y AQUÍ ESTOY

Y aquí estoy
encrucijado,
aquí estoy muriéndome en mi inocencia
aquí está mi sombra temblando de frío
los ojos caídos, la guerra que sobrevive,
el infinito que se agota y se comprime
en nubes densas y opacas como el algodón en la tierra.

Y aquí estoy
temblando,
sueño con mártires y princesas,
con los castillos medievales, las viejas herejías
esas noches anónimas de máxima locura y explosión,
alejados de ti, de tu iglesia, de tu figura
anhelantes de inventar realidades sin tu omninada,
sin nada que temer más que el vivir.

Y aquí estoy
vencido,
otra vez las cadenas han cercado mi espacio
me han vuelto un esclavo. Mis ojos lloran, mi corazón desangra
mi piel se cae y con ella mi ánimo. Otra vez,
hemos perdido nuevamente, otra vez,
esa mano se apodera de estos inútiles esclavos.

Y aquí estoy
perdido,
lejos del hogar, lejos de los sueños
envuelto en tragedias y pesadillas
mi hogar se encuentra en las sombras
la noche cae. Tropezamos con ella,
todo sigue igual, el mismo árbol,
la misma cara, el mismo escándalo
de gritos que se extinguen como la luz de la vela
cuando regresa la electricidad
así, mi alma agoniza ante su miseria.




JUGUEMOS A SER LIBRES

Juguemos a ser libres.
Tú una mariposa que deambula entre mi néctar
yo seré el viento que recorre tus alas
juguemos a ser libres. Pronto vendrá el ocaso.

Juguemos a ser libres.
Ella será el río por el cual nadaremos
tú serás el agua que nutre mis tierras
tan secas y necesitadas de tu frescura
juguemos a ser libres. Pronto vendrá la muerte.

Juguemos a ser libres
aquellos serán los testigos del escándalo
ella bailará un tango para mí
porque yo seré la música que entra por sus oídos
y tú serás la voz que todo lo armoniza
juguemos a ser libres. Pronto vendrá la noche.

Juguemos a ser libres
ellos serán los pecadores,
aquellos inocentes serán la acusación,
la justicia será ella
yo seré el culpable
y tú mi esperanza
juguemos a ser libres. Pronto vendrá el trueno.
Juguemos a ser libres
mi madre cocinará un caldo de congrio a la chilena
ellos se lamerán las manos como unos perros
aquellos los mirarán, envidiosos al no ser invitados,
ella será el mantel en donde ubicaré mis servicios
yo seré la utilidad de la cena
y tú serás la conversación alegre, las risas milagrosas
juguemos a ser libres. Pronto vendrá el de arriba.

Juguemos a ser libres
mi padre será el carpintero que arregla la luna
verás a mi madre barrer coquetamente las hojas de tus pétalos
ellos reirán una y mil veces
aunque aquellos se enojen porque pretenden dormir
la compasión la traerá ella
tú serás el vino que embriaga
y yo los recuerdos
juguemos a ser libres. Pronto vendrá nuestro asesino.





¿QUÉ DEBEMOS DECIR?

¿Qué debemos decir?
Aléjate por favor,
vete de aquí
gracias, pero no
no te necesitamos...
¿Qué debemos decir?
Creo sinceramente que
Estamos hablando con un sordo. 



SE ACABÓ LA FIESTA

Se acabó la fiesta.
Llegó el viejo gruñón otra vez
digamos adiós a la música de trance
a los cigarrillos, al trago,
a la droga, al sexo, a la noche,
a las confesiones sexuales, amorosas y sorpresivas
se acabó la fiesta.
Llegó el viejo gruñón otra vez...
Te dije que había que cerrar la maldita puerta.




TOQUE DE QUEDA

Para todos los que quieren gritar
griten despacio
estamos en toque de queda.
No. No es un simulacro.
Las calles están vigiladas,
tu baño, tu mente, tu corazón, todo,
absolutamente todo está supervisado
por guardianes anónimos.

Se ruega guardar silencio.
Hay que ser valientes. Nunca llorar
no mostremos nuestras debilidades
él no merece nuestro suplicio
para él, las maldiciones
para él, un pasaje a la mierda eterna.

¡Silencio!
No griten. Estamos en toque de queda.
Hay que vivir en el anonimato.




MENÚ DEL DÍA

Al desayuno
un poco de cristiano estúpido revuelto
con un café cortado
por solo $1.500 oraciones rutinarias y reiterativas.

Al almuerzo,
una entrada de puritana violada con aceite de oliva
más un consomé de cogotes de pecadores
y el plato fuerte del almuerzo...
será una porción de papas fritas de senos con un cuarto
de hipócrita con salsa de corruptos,
un néctar de esperma de pedófilos
o un buen vaso de vino de asesinos
y el postre es variado...
desde la leche condensada de prostitutas,
la manzana podrida de teología
o un pedazo de torta de cuerpos mutilados en la guerra
todo eso por tan solo $4.000 ave maría, padrenuestros y unos
30 azotes de culpabilidad.

A la noche
antes de violar a la hermana de tu vecino
y asesinar a tu suegro
el aperitivo revitalizador:
el vaso del día es un buen trago de impotencia
acompañado con aceitunas de injusticia
y cigarrillos marca Ira
por tan solo $1.200 Aleluyas y coimas.

No abrimos todo el día. No somos prostitutas
No fiamos. Que mueran los vagabundos y los perros
para asarlos a la parrilla y usar sus dientes como tenedores
el cliente nunca tiene la razón.
Bienvenidos al Paraíso.





A OSCURAS GRITÉ TU NOMBRE EN EL MURO DE BERLÍN

A oscuras grité tu nombre en la muralla de Berlín
esperando a que una de las señoritas desde el otro lado
se dignara a contestar mi saludo
más solo escuché el ladrido de un perro tísico
que cubría la oscura noche invernal berlinesa
mis pies mojados de tanta espera comenzaron a patear el suelo
despertando a las ánimas judías que vagan por las noches
al nacionalsocialismo que duerme entre las piedras
pero me atreví a gritar tu nombre
a invocar la mirada constante, fría y malévola
que surge desde la otredad del ladrillo carcomido
por mis puños ensangrentados.
Y entonces, cuando el hielo cubría mi mente
escuché un grito esperpéntico desde el otro lado de la muralla
supe que estabas ahí
semidesnuda, morada de tanto frío que soportaba
tu otrora piel de terciopelo blanco
y lloré por ti, por tu ausencia, por tu desgracia
por estar viviendo la vida tuya y porque tú vives en la mía
en esa en donde yo soy un fracasado
un poeta que habla de berlín sin conocer sus calles
pero que desde el imaginario poético
te piensa y pide por tu dulce alma
para que descanse en paz
mientras acabo estos versos y
duermo en la indiferencia del sufrimiento ajeno.







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