miércoles, 15 de octubre de 2014

CARMELA NÚÑEZ URETA [13.691]


Carmela Núñez en uno de los homenajes a la memoria del poeta César Vallejo en el parque que lleva su nombre.



Carmela Núñez Ureta 

Nació en Arequipa, Perú en 1921 y murió en 2014.
Pertenece a un clan familiar marcado con los dones de las artes: los Nuñez Ureta, hijos de Pedro C. Nuñez y Julia Ureta.  Hermana menor de Teodoro (1914-88) y Alejandro (1920-74),  grandes maestros pintores, sobretodo de la acuarela.   Estudió en la Universidad Nacional de San Agustín y la Universidad Católica Santa María.  Educadora, periodista, actriz y sobretodo, escritora.  Publicó cinco poemarios (Tú, A mis niños, Mística, Tierra, Huellas), pero tiene poesía y prosa aún inédita   (cuentos, obras de teatro, ensayos y conferencias) que ameritan su publicación.  En 1980, junto a otras escritoras, fundó el Centro de Escritoras de Arequipa.  Ocupó la primera  Directiva, acompañada por  las escritoras Alicia Núñez Borja, Andreína Rivera Dávila, Doering Alatrista, Mary Marré, y Ana María Martinez.  Sufrió el terrible dolor de perder tempranamente a su único hijo, el pintor y escultor Pablo  Núñez Ureta (1954-2001).



Las palmeras de La Apacheta

(a veces titulado Las palmeras del cementerio.  Dedicado a la muerte de su hijo.  Publicado en Tierra -2003-)


Unípedas brujas, con los cabellos verdes
son las altas palmeras del viejo cementerio,
de la tarde a la noche se inclinan cuchicheando
sobre los muertos vivos que lloran a sus pies.

Qué oscuras palabras se dirán al oído,
¿conversarán acaso de amores perdidos?
hablarán de los muertos o tal vez de los vivos
que se quedan inertes tras los mármoles fríos.

No me gusta su altura porque no puedo oírlas,
solo el viento conoce sus palabras mudas;
si pudiera elevarme, llegar a su nivel
tal vez me contarían la historia que susurran.

Si por las noches salen los huesos a besarse,
si los cráneos se buscan, si se abrazan los húmeros,
si los fémures salen danzando entre los árboles
y las órbitas huecas persiguen a la luna.

Tal vez me cuenten como en las noches negras
las mandíbulas cantan salmodiando aleluyas,
se despiertan sonoras las antiguas caricias
y el amor resucita en los óseos coloquios.

Cómo me gustaría saber lo que ellas saben,
sacarles su secreto, robarles su misterio,
para entrar en su mundo sin temor y enredarme
por siempre en lo absurdo de su extraño murmullo.



Escribir

Se puede escribir cualquier cosa:
escribir que una está triste
que ya no importa nada,
que las ramas de los árboles
ya no tienen gusto ni tienen alma,
que las cosas son opacas,
que no hay verdes en la vida.

Se puede escribir cualquier cosa
cuando no importa quién nos lea,
porque no saben leer,
porque se acaba el agua
y se crece la sombra
y a nadie le importa el amor.

Se puede escribir cualquier cosa
cuando el tiempo nos llega,
sin embargo es un tiempo largo
al que se le va el color,
un tiempo enclenque y pálido
que no sirve ni para dar las horas,
un tiempo seco que corre en medio
de muchas acequias y no las toca.

Cualquier cosa se puede escribir
así sin pensar, porque ya nadie
piensa
para escribir o para reír ni para nada.
Cualuier cosa  se puede escribir
en esta máquina que es como
cualquier otra
y más compañía que cualquiera
porque te escucha mejor
porque no sabe amar
ni le importan los problemas.

Cualquier cosa se puede escribir
sólo para decir
lo que no se sabe vivir
o para aprender a morir






CARMELA NÚÑEZ URETA ARTISTA COMPLETA DE UNA GRAN FAMILIA

Carmela Núñez Ureta nació en Arequipa. Su padre Pedro C. Núñez y su madre Julia Ureta, al unir sus vidas crearon una familia de artistas, la gran familia NÚÑEZ URETA. Dignos representantes peruanos con renombre mundial y de invalorable aporte a la cultura de nuestro Perú: Pintores, escritores y músicos, que al decir de un buen señor ¡son de Arequipa, como el "sillar": bello, blanco, nuevo, viejo, roto, labrado, liso, caído, brillante, eterno!

Carmela estudió en la Escuela Juan Manuel Polar, posteriormente, en el Colegio Nuestra Señora de la Asunción. Estudió Letras y Pedagogía en la Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa y en la Escuela de Periodismo y Relaciones Públicas de la Universidad Católica "Santa María". Es maestra, periodista, actriz, narradora, mujer, madre y poeta.

Ha publicado 5 poemarios y tiene inéditos cuentos, obras de teatro, ensayos y conferencias.

Sería muy largo enumerar sus obras, así como citar sus premios y distinciones; podemos decir que ha dedicado su vida entera a leer, escribir, actuar y dormir; además de orar, amar a Dios y buscar la paz sobre todas las cosas. Carmela Núñez Ureta fue, además, Fundadora y Primera Presidenta de la prestigiosa Asociación de Escritoras de Arequipa. Asociación que hace poco cumplió 30 años de valioso trabajo. Lamentablemente, Carmela no pudo asistir debido a un fuerte resfrío.

La poesía de Carmela es un canto de amor que, al mismo tiempo, está poblada de recuerdos sin quedarse en el pasado. Su voz también es social. Encontramos atisbos de protesta en sus palabras por la vida que circunda en la sociedad peruana, corrompida por dirigentes que no dejan huella. Su poesía es intimista, social, mística, singular, fraterna, plural. Además, es un espejo de la vida en Arequipa, con el encanto de sus paisajes, de su naturaleza con sabor a fruta, de su campiña, de sus elementos como la llama, el cielo, el barro, los sauces, las acequias. Su poesía es un abrazo con sabor a tierra húmeda, es una forma de pernoctar en el bello solar del clan Nuñez Ureta.

Carmela es una mujer solidaria, inteligente, súper sensible y con mucha alegría por la vida. Sin embargo, al leer su poesía también encontramos ese sabor a luto, que a todos nos ha de golpear en algún momento. En su caso fue la pena por la ausencia del único y amado hijo: Pablo Núñez Ureta.


"Ayer había flores y colores ardientes,
había verdes nuevos como esperanzas frescas,
ahora sólo queda un gemido largo, hondo, silencioso
que pone charcos de pena en todos mis caminos..."


La experiencia de vida dedicada a las letras de Carmela no solamente está en su patria grande Arequipa. Ella viajó a otros países como EE.UU. Su estadía en España fue agradable porque es una fervorosa admiradora de la generación del 27 de la poesía española. Ella conoce de memoria poemas de Machado, Alberti y otros.

Carmela ama el verde intensamente, porque es la naturaleza misma de Arequipa, de todos los lugares que recorre, de los paisajes pictóricos de sus hermanos Teodoro y Alejandro y en fin, de toda su familia.

Con Carmela aprendimos que:



"Se puede escribir sobre cualquier cosa:
escribir que una está triste
que ya no importa nada,
que las ramas de los árboles
ya no tienen gusto, ni tienen alma...”



Asimismo, reproducimos un texto escrito por ella, el cual está al final de un libro suyo:


"Desde muy niña \aprendí a decir poemas, los decía en la escuela, más tarde en el colegio, hasta que un día pensé. ¿Por qué expresar lo que pienso y siento con voces ajenas? ¿Por qué no expresar con mi propia palabra, con mi propio grito de amor, el dolor?... Entonces, otro día comencé a escribir, aún no he podido lograr hacerlo bien, pero sigo intentándolo. Con el tiempo y los sucesos que han ocurrido en mi vida y en mi pueblo, la necesidad de escribir ha sido cada vez más exigente. Me ha guiado siempre el deseo de comunicar a los demás un poco de esperanza, un profundo anhelo de justicia y un afán inacabado de amor y de paz. No sé si lo he logrado o no, pero seguiré escribiendo sin temor a la crítica, sin tener en cuenta las "modas literarias", ni la opinión, generalmente equivocada, de los entendidos.


Yo creo que quien desea escribir, no debe hacerlo con la intensión de llegar a ser notable, sino con la convicción de decir su verdad, de la mejor manera posible y con el único propósito de compartir con los demás, el deseo de un mundo mejor".

A continuación otro comentario acerca de la Mística de Carmela:

Desde 1978 cuando leímos una selección poética de Carmela Núñez Ureta "TÚ" , encontramos que con sutileza romántica, iba dejando el amor en la profundidad de su poesía:



"La sombra de los árboles
peleará con el viento
y estará rota la estrella
donde empezó el amor"...


Sin embargo en Mística, encontramos una entrega amorosa, una dulce sonrisa, una serena paz al dolor que lacera. En esas instancias su verso encuentra su raíz más profunda y el dolor se hace esperanza, plenitud y sosiego. Clama a Dios con nostalgia, se abre al amor de los niños descalzos, de los ojos sin luz, de los gritos del hambre:



"Ya no importa la muerte
el llanto, ni la pena,
en tus brazos abiertos
la dicha se hace eterna"...



En sus versos remarca un matiz de honda espiritualidad y encierra una poesía moderna, sin dejar de ser romántica: es realista. Su lenguaje es simple, cadencioso, sencillo, manifiestamente profundo, no hay contrastes... (comentario de Elsye Canal).

Como pueden apreciar, hay muchos comentarios admirables a lo largo de su vida; además, de anécdotas y jornadas culturales como profesora y a través de la Asociación de Escritoras de Arequipa.

Ella escribió varias obras y ha logrado publicar cinco libros:

1.- "TÚ", escrito en 1978 y  que en su primera página dice:
     "Tú... cualquiera que seas, escucha mi voz
     en el aire y en el agua, va siempre en tu búsqueda,
     para que juntos podamos afirmar nuestra esperanza".
2.- A MIS NIÑOS
3.- MÍSTICA  en 1995
4.- TIERRA  en el 2003
5.- HUELLAS en el 2004. En este libro encontramos  un breve resumen de sus datos biográficos.

En su reconocida entrega por el arte, Carmela Núñez Ureta logró actuar en varias obras de teatro, participó en programas de televisión para Extensión Educativa y es una declamadora realmente genial y expresiva.
Gracias Carmela Núñez Ureta, por sus ejemplares logros, porque siempre aprendemos de sus méritos e historia viviente.

Arequipa y el Perú sienten el orgullo de saber que Ud. es un ícono de la cultura y siempre digna representante de una gran familia, que sigue dando lauros a nuestro país.






A los 93 años de edad, la poetisa y actriz Carmela Núñez Ureta dejó este mundo con un legado lleno de creación e inspiración artística.

Nació en Miraflores en 1920, fue hermana de los reconocidos acuarelistas Teodoro y Alejandro Núñez Ureta y madre de otro pintor, Pablo Núñez Ureta, quien falleció en 2001. Por él escribió "Las Palmeras de La Apacheta", uno de sus más conmovedores escritos.

Fue maestra, periodista, actriz, poeta y presidenta fundadora de la Asociación de Escritoras de Arequipa, grupo con más de 30 años de servicio. 

Escribió cinco poemarios y obtuvo reconocimientos a nivel internacional y local. El último lo recibió el año pasado, de manos del municipio provincial.

"A las personas que hablan bien de su tierra y escriben maravillas sobre esta no se las valora. Arequipa perdió a la última poetisa 'honesta' que tuvo", lamenta su sobrino-nieto Teodoro Núñez Medina, pintor y exdirector regional del ex Instituto Nacional de Cultura (INC).

Refirió que Carmela Núñez se ganó el calificativo por siempre retratar con la mayor objetividad la realidad a través de sus escritos. Núñez Medina la recuerda por su alegría y el don de hacer sonreír a quien lloraba.

Los poemas de doña Carmela se caracterizan por su romanticismo y describían la esperanza, el dolor, la naturaleza y hasta los paisajes y campiña mistianos. "Mi tía (abuela) siempre decía: el secreto de vivir en paz es no fregar a nadie. Fue una mujer única, pero tenía que elegir entre seguir viviendo para ver morir a los que quería o partir", dice Teodoro.

Lamento en las redes

A pocas horas de conocerse el deceso, varios artistas y admiradores de su obra mostraron su pesar en las redes sociales.

El poeta Luzgardo Medina la describió como una "niña juguetona". "Hermana mía, descansa en paz, quedas viva en nuestro pensamiento", escribió. 

La poetisa Luz Vilca destacó que hace poco la visitó "conversamos en la salita llena de polvo, donde con Pablito (su hijo) leíamos poesía".  








1 comentario:

  1. felicito a quienes estén haciendo posible la difusión de los grandes representantes de la Literatura Arequipeña.

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