martes, 10 de noviembre de 2015

CELINA GALERA [17.434]


Celina Galera 

(Catamarca, Argentina 1974) publicó el poemario Interno, disperso, continuo en el año 2000, y en 2008 su poesía fue incluida en la antología Poesía Joven del Noroeste Argentino, compilada por Santiago Sylvester y publicada por el Fondo Nacional de las Artes. De los colores (El suri porfiado. 2015), es su último poemario publicado.

Como artista plástica recibió numerosos premios, entre otros el 2º Premio en el Salón Regional de La Rioja (2015).



(Piedras)

Trozos dispersos de un cuerpo antiguo,
miembros que entonces encastraban.
Ya erosionados los lados,
todas las partes andan huérfanas.

Irreconstituíble.

Pudo ser mortero tu costado,
pudo dejarse arrastrar por algún río,
ser prisionero en una pirca,
hito en el camino.
Fetiche de un hombre.

Que tu otra mejilla pudo seguirte como arena...
o desviarse con el viento.

Pero ahí está
de sólo estar,
indiferente al concepto de familia.

(de Interno, disperso, continuo)




EL MAESTRO DE BIOLOGÍA

Desteje el mundo en su porción más pequeña,
en planos verticales de pizarra,
palabras elocuentes
y gestos respetados.

Sabe valerse de tintas rojas para crear asombros.

Los niños lo miran
como un público obligado a repetir
el ciclo del agua mansa
y otros,
por pequeños, descreen
mientras hacen hervir sus propios líquidos.

Cuando regresa a casa sigue enseñando.
Y en la mesa del mediodía, mientras se comen carnes
vuelve a adular a los insectos...

"Cada ser tiene un costado amigable", dice a los hijos,
pero una lección no es un consejo.

(de Interno, disperso continuo)




I

Aún no amanece.
¿La cama huele a hazaña o a capricho?
¿Presienten los demás, los ajenos a esta casa ,
que se ha perforado el tiempo?
Una mujer busca respuestas en el aire,
en el acento de la gota de aire contra el cielo, 
el aire contra el aire,
contra la nada misma.
Otra mujer siente iguales mareos y se imagina un viaje.
Sin dudas algo natural se ha visto interrumpido,
algo que los utensilios y enseres cotidianos no conocen.
No se trata sólo de amor, ni de deseos,
no se trata de magia,
no de leyes ni designios,
no de inocencia.
Es concederse al desvelo y agraciarse en hacer pasar la rueda. 


II

Y una vez abierta la puerta hay que sonreír a los que llegan.
Ser el puerto que se construye
y a la vez el barco.
Vasto almacén donde depositar las provisiones traídas.
Algo comienza a ser
y celebramos.
Cuantiosas ceremonias para multiplicar la suerte de los iniciados
y el buen destino de la carga.
Ahora dejemos la puerta abierta.
Dejemos entrar la música y su sortilegio.
Afortunado quien conozca el origen del canto.


III

Llegará el tiempo en que seremos contemporáneos,
semejante complicidad y diferentes preguntas.
Mientras tanto, 
uno sigue a su guía en el juego de amansar los acontecimientos.
¿Quién domará primero a quién?
La fórmula se gesta simultáneamente.

(De: El Libro de los Nacidos - 2007)






No hay comentarios:

Publicar un comentario