domingo, 12 de octubre de 2014

MIGUEL CARRILLO NATTERI [13.636]


MIGUEL CARRILLO NATTERI 

(1933 - 2012)
Nació en Chincha (Ica), Perú. Trabajador bancario y dirigente sindical. Miembro del Grupo Intelectual Primero de Mayo. Publicó en los cuadernos de su agrupación así como en diarios y revistas de Lima y su provincia. Obras publicadas: El ausente y otros poemas (primera edición-1961 y segunda edición-1973), Las Manchas (Lima-1964) y Los Días Abolidos (Lima-1966).



Ah mis días abolidos

En qué oquedad la sombra mía
se retuerce
como un gemido, su secreto
difuso, muerto?
En qué alambre o riel
su devaneo
siembra el corcho de la aurora,
su silencio?
En qué barrote se hiela el frío,
de la cruz,
que llevo dentro?
Ah lisonjero pan desvanecido,
nube escapada,
que corre de mi sino
como un potro viajero
En que ojo del barrote esperas,
al asesino,
del día que se fuga
traicionero?
En que noche o en qué celda
que nunca acaba,
sonreirás de nuevo
al prisionero?
Ah mis días abolidos, alelados;
desde esta tarde
vomito fuego!




DECLARACIÓN 

No soy un vasallo sumiso
o soldado enajenado
atado
a la maquinaria guerrera.
Por lo tanto:
Dejádme vivir como yo quiera.
Soy obstinado
aunque muelan mi martirio.
Prefiero ser
inerte a solas
antes que mal acompañado.
Estoy al margen del círculo
vicioso y aterrador del mundo.
Dejádme volver a la casa
donde aún presiento la dicha.
Mi estirpe sostendrá la cólera
el próximo milenio.




MISMÍSIMO DOLOR

La sangre de los poetas decora las calles
y las mejillas de las muchachas ingenuas.

Los tiempos actuales a sobresaltos se viven
sin lugar seguro donde guardar el pellejo.

Bolsillos agujereados no tienen cabida
para una sonrisa tierna o despreocupada.

Nos quitaron todo el espacio vital
hasta los sueños hermosos por vivir.

Todo nos quitaron en esta ciudad caótica
de hombres cavernícolas despreciables.

El infierno arde intensamente
y nosotros calmando la ira fatigada
a los pobres diablos explotadores
y a nuestro mismísimo dolor escarnecido.

Nadie jamás al poeta citadino pregunta
si aliento, abrigo y amor necesita.



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