domingo, 13 de mayo de 2012

JEYMER GAMBOA [6.839] Poeta de Costa Rica


Jeymer Gamboa

Nació el 5 de enero de 1980 en Santa Cruz de León Cortés, al sur de San José, capital de Costa Rica.  Allí transcurre su infancia y adolescencia. Después se traslada a vivir a la capital donde realiza estudios en periodismo, producción audiovisual y literatura latinoamericana en la Universidad de Costa Rica. Trabajó como periodista en el semanario Universidad y colabora con los suplementos culturales Forja y Libros. Forma parte de un colectivo de jóvenes realizadores audiovisuales llamado Bisonte Producciones. Desde hace cuatro años reside en Buenos Aires, Argentina donde refuerza sus estudios en Diseño de Imagen y Sonido. Tiene especial interés por la realización y la investigación de cine experimental. También realizó talleres de escritura en la Casa de la Poesía y con el escritor Fernando Molle. Días ordinarios es su primer libro.



TEMA PARA UN CUADRO DE LIMBERTH

Mañana comienzan las obras
para hacer subterráneo
el tendido eléctrico.
A las ocho de la mañana
los pájaros miran llegar
los cascos amarillos.


LA PARTE QUE SUSTITUYE EL TODO

Cada vez me atrae menos la pintura.
Pero debo decir que me gustan
esos cuadros de Limberth
donde se limita a pintar sus zapatos.
Limitar: imponerse límites en lo que se dice o se hace,
con renuncia voluntaria o forzada
a otras cosas posibles o deseables.
Porque es solo eso:
un par de zapatos
que han resistido
otro invierno.


MOBY DICK

El auto lo dejaron abandonado
en una playa de Tarifa
como un cetáceo de hierro
donde ahora entran y salen
pájaros marinos.
La aguja todavía indica 220 Km/h.


PERCHAS

La poesía no va a reparar esta relación.
Ni los otros electrodomésticos
dañados.
Lo que en verdad aterroriza
es abrir el ropero
y ver tantas perchas sin nada.


EXTRACTO DE NOVELA EPISTOLAR

Querida S.
lo que siento es lo que observo:
el tendedero de la vecina
en orden cromático,
el sol que cae diagonal
sobre la terraza
y los pájaros que hacen círculos
alrededor de las antenas de televisión.



ÁRBOLES DE REZNIKOFF

Los platos lavados, me asomo
por la ventana para ver
los árboles secarse.
La lluvia duró
igual que la canción
del vecino,
apenas para dejar
unas gotas en las ramas
como brotes de una
flor muy rara.


D.N.I.

Un sol radiante a cero grados
sólo es un dibujo en el cielo.
Aunque parezca cálido
su promesa es falsa.
Un sol radiante a cero grados
y la fila para legalizar los papeles.



EX AMIGOS ON THE ROAD

Encuadre para película de carretera
(la historia es sobre dos ex amigos
que intentan revivir un viaje de la época colegial
a playas del Coco)
desde el asiento trasero
de un mercedes gris sin overjolear:
los dos creían ir preparados
para los silencios incómodos.
Ahora falta ese cassette con la canción
The boys of summer.

del libro Días ordinarios (Valencia, Pre-textos, 2010).


Gillettes usadas

La puerta está abierta
para que la canción de la radio
llegue hasta el baño.
Ella está depilándose las piernas
y pensando en que esto va mejor.
Su momento cumbre de reflexión
se interrumpe justo
con ese corte cerca del tobillo.


*


Estos hombres de café, periódico y rituales gregarios 
(indiferentes, por decisión propia,
al uso de la agenda y el teléfono celular;
la punta de sus zapatos desgastada; años sin ir al dentista y al optometrista) 
retornan a sus casas cuando está por anochecer
y se paran detrás de una ventana
–siempre le dan dimensión a sus vidas con una ventana–
a esperar que la fogata del cielo termine de apagarse.
Ahí permanecen contemplativos y cinematográficos
sosteniendo un vaso de whisky
en una habitación a oscuras. Hay que cambiar el fusible de sus conciencias.
Con la otra mano se palpan el tórax
porque saben que entre una duda y una resolución
hay un dolor físico. Fuman, obvio.
Y les gusta que su cara y las paredes del cerebro
se llenen con las sombras que proyecta el alumbrado público
o las luces del río vehicular.


*

Me voy despacio hacia el oeste.
El sol se ve borroso por el polvo que levanta
una colonia de insectos hidráulicos
–grúas y excavadoras–
sobre las construcciones cerca del río.

Ahí las formas han perdido su contorno y materialidad
como la imagen de un billete olvidado en unos jeans
que uno encuentra después de tres o cuatro lavadas.






No hay comentarios:

Publicar un comentario