lunes, 8 de julio de 2013

RODNEY DeCROO [10.201]


Rodney DeCroo, poeta, escritor, cantautor y periodista estadounidense-canadiense. Vive en Canadá.






Quizás es sólo por el tiempo.
aunque yo escribo poemas
mis dientes están gastados y amarillos,
mis ojos aburridos, aburridos

aunque yo canto
tengo cubierta de cenizas mi garganta;
mis pulmones,
dos bolsas de aire envenenado.

aunque yo bailo
mis piernas son débiles estacas
con pies desnudos y feos

me molesta el sinsentido de algunas flores

yo podria haber sido...
¿qué?
no importa

el sol es un martillo
ensartando clavos en mi cerebro

sonrío y digo
¿cómo estás?
y no me detengo
a escuchar la respuesta

tu necesidad de hablar es demasiado grande
y suficientemente cansado está mi oído

cuando duermo
yo pretendo que es el sueño
la muerte descendiendo
y aun así
tengo miedo de morir

la luna no es más
que cráteres y polvo
yo he visto esas imágenes

la radio dispersa sus chirridos

ya estoy solo
y aún ansío soledad

la ambición es una charlatana
vendiendo sueños de televisión
que no deseo comprar

la infancia es un jardín
descuidado y con mala hierva
yo cerré su puerta
muchos años atrás

lo siento
no puedo y no quiero
ofrecerte a ti belleza

esta noche y siempre
la ciudad ha sido fea
yo no puedo rimar el sufrimiento
y me niego siquiera a intentarlo

somos perros escondiéndonos
de las pulgas
que nos muerden

tenemos todo y nada

me sentiré mejor mañana
y mañana y otra vez mañana

me agarro de las faldas de Dios
como un niño asustado
temeroso de la oscuridad

las estrellas se consumieron
hace mucho tiempo

las universidades envejecen
con los libros de siempre

el pobre se hace más pobre
el rico más rico
nada de esto es nuevo

la verdad nunca ha estado de moda
y nunca lo estará

los animales nos odian
pacientemente esperan

¿Te inquieta mi poema?
tú lo ignorarás
como a un asunto que no interesa

peináte
cepillate los dientes
ponte tu mejor ropa
haz un depósito en el banco

come en tu restaurante favorito
embriágate
ten sexo seguro
ve al teatro
ve al cine
baila en la oscuridad
trenza tus piernas con otras piernas
medita sobre las viejas sabidurías de moda
yo te rechazo a ti y a tus cosas

las sirenas siguen sonando
la lluvia sigue cayendo
y no me queda nada por decir
salvo que nada odio mas nada amo también

juntémonos
en la oscuridad
y escuchemos
nuestras voces

no es música
mas es lo que tenemos








Aunque escribo poemas..

Aunque escriba poemas,
tengo dientes gastados y amarillos
y tengo ojos tediosos.
Aunque yo cante
está llena de cenizas mi garganta;
mis pulmones son bolsas
de aire envenenado.
Aunque baile,
mis piernas son tan sólo
dos débiles estacas con pies feos.
La infancia es solamente
un jardín descuidado,
y no puedo ni quiero
ofrecerte belleza,
porque esta noche y siempre
la ciudad es deforme,
y no puedo rimar el sufrimiento,
y me niego a intentarlo.
Tan sólo somos perros escondiéndonos
de todas esas pulgas que nos muerden.






Días como éste
De pie, en el umbral, compartimos un cigarrillo. La lluvia forma largas hileras de cristal que se revientan contra el concreto. Te comento lo que imagino y me dices que no, me dices que la calle es un rostro y  que la lluvia no es hileras de cristal sino lágrimas que caen de los ojos de un dios ciego. En esta oscuridad casi no distingo las heridas en tu rostro, la manera en que tu mano tiembla al llevar el cigarrillo hasta tu boca, como tus ojos se agrietan al mirar. Injustamente, me dices, el casero te aventó fuera y cómo no creerte si te veo buscar a alguien para acallar la rata que daña tu estómago, para calmar tus dedos en las cicatrices de tu piel y la sangre, seca ya, en lo que queda de tus uñas carcomidas. Morirás en esta calle y con esta lluvia o quizá en la puerta, o medio desnudo en el callejón. Me devuelves el cigarrillo y nuestros dedos se rozan. Sonríes, y por un momento caminamos en la brisa entre pétalos que caen de los cerezos florecidos. Me tomas del brazo y me acercas hacia ti. Me dices que días como éste son prueba fehaciente de que vivimos para siempre. Siento el olor de la lluvia primaveral en tu cabello, y tu aliento te deja huérfano mientras la lluvia cae sobre la calle y se despedaza como un cristal. Días como éste son prueba de lo perderemos. 

Traducción: Julio C. Palencia 

Una muestra de su música la encuentras en el enlace siguiente:     
http://www.reverbnation.com/rodneydecroo







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