miércoles, 28 de mayo de 2014

JOSÉ VÍCTOR ZACONETA [11.843]


JOSÉ VÍCTOR ZACONETA

(Oruro, Bolivia, 1865 – La Paz, Bolivia, 1945).- Poeta.
Contador de profesión, se desempeñó como funcionario público: Fue Rector de la Universidad de Oruro y Presidente del Concejo Municipal de aquella ciudad. Se dedicó además a la investigación del folklore regional. A decir de Yolanda Bedregal, el autor “describe con soltura temas patrióticos, históricos y de protesta contra instituciones como la Prensa de su tiempo”. Escribió también en quechua.

El poema ‘Los Chipayas’ dedicado al grupo étnico del mismo nombre -antologado por Guerra/Guzmán- dice en un fragmento: 



Ostentando el orgullo de su raza 
y de su sangre inmaculada y pura 
la indomable altivez, de pie, en la puerta 
de su achatada casa 
menos que casa, miserable choza 
perdida en la llanura,  
destácase la imagen 
de la india esbelta, varonil y hermosa, 
que impera allí cual reina de la pampa 
¡o del desierto solitaria diosa! 
con sus vivaces ojos, amaestrados 
a devorar distancias y horizontes, 
escudriña el vaivén de los ganados 
entre quiebras de lejanos montes,
la undosa cabellera al son esparce  
con sus brazos fornidos y morenos….



LIBROS

Poesía: Poemas (1894); A Bolivia en el primer centenario de su gloriosa independencia (1925); Entre el polvo y el camino (1925); Odas y poemas (1925).



Santuario de la Virgen del Socavón
Patrona de Oruro



Venimos desde el Infierno
a pedir tu protección,
todos tus hijos los diablos,
¡Mamita del Socavón!

Las cuentas de tu rosario
son balas de artillería:
deféndenos pues con ellas
ya de noche, ya de día.

Aquí estamos de rodillas,
échanos tu bendición
a estos tus pobres mineros,
¡Mamita del Socavón!

No nos niegues, pues, tu amparo
divina madre de Dios:
¡Hasta el año, Mamacita,
hasta el año, adiós, adiós!

José Víctor Zaconeta, 
La Virgen del Socavón y la Corte Infernal, en Odas y poemas. 
Oruro 1925




1 comentario:

  1. Mi bisabuelo... mi admiración, quien tuviera tu refulgente espíritu y tu pensamiento memorable… nos queda regocijarnos con tu recuerdo y enaltecer tu apellido... Atte. LZR

    ResponderEliminar